Saber qué le pasa a alguien por la cabeza es misión imposible pero uno de los grandes deseos de la humanidad a cualquier edad. Desde padres para saber qué piensan sus hijos, los miembros de una pareja a compañeros de trabajo. Seguro que quitaría muchos quebraderos de cabeza pero a día de hoy es imposible y ¡gracias!
Lo que sí es posible es entender cómo funciona nuestro cerebro. Acercar de una forma práctica y didáctica, los resultados de años de investigación de, es el objetivo de muchos profesionales relacionados con la mente, entre ellos, nosotros los psicólogos.
En este caso el cine recrea el mundo de las emociones con su nueva película, Del revés. Y esto es lo que ocurre, que las emociones a veces nos vuelven del revés. Ellas son las protagonistas de la película en el cine y de la película de nuestra vida. Sin emociones ¿qué somos? Nuestra psicología transcurre entre pensamientos, emociones y conductas. Interrelacionadas, se condicionan entre sí creando infinidad de posibilidades. Nunca en la historia de la humanidad se le había dado tanta importancia a las emociones. Conocerlas y gestionarlas se ha convertido en máxima prioridad, casi cuestión de estado, no solo en el mundo adulto sino en el infantil. Es evidente que cuanto antes conozca mi mundo emocional, mejor me podré relacionar conmigo mismo y con los demás.
Se ha pasado de esconder, ridiculizar o castigar estados emocionales a generarles un espacio, y a respetarlos. Ya se sabe que las consecuencias de la mala gestión emocional acaban por reflejarse en la vida personal, social, y laboral de las personas, condicionando sus vidas y la de los demás. No olvidemos que las emociones también se contagian. Se está trabajando para educar en Inteligencia emocional ya que ha quedado patente tras el gran trabajo de Goleman entre otros, que solo tener buenas resultados académicos, no es garantía del famoso éxito.
Investigadores de la Universidad de Aalto, en Finlandia han creado el primer mapa termográfico que representa cómo reacciona nuestro cuerpo cuando experimentamos una emoción. Estas imágenes ya no dejan indiferente a nadie y ayudan a asimilar y porque no a creer lo que en palabra ya se decía. Que el estado emocional incide para bien o para mal no solo en nuestra mente sino en nuestro cuerpo. Mente y cuerpo son inseparables.
La película ha elegido 5 emociones primarias para ver sus aventuras en la cabeza de una adolescente. Esas emociones comunes en la edad infantil y adulta, las traemos de serie y las compartimos con los animales. Así que han favorecido la supervivencia de nuestros antepasados. Por lo tanto si gracias a estas emociones estamos aquí y nos permiten desenvolvernos, no son ni buenas ni malas, ni positivas ni negativas, simplemente son. Lo que no gusta tanto son las sensaciones que provocan en nosotros algunas de ellas, y por ello se han etiquetado.
¿Cómo comenzar nuestro entrenamiento en Inteligencia emocional?
¡Conociéndolas! Tan importantes que son y si preguntas por ellas en cualquier formación, charla o taller, pocos responden con exactitud (la primera yo en su día). Así que vamos con las presentaciones:
– Miedo: Fear inspirado en la forma de un nervio y sus amigos, el terror, el horror, el pánico, el pavor, el susto, la alarma, la fóbia… El miedo te permite salvarte de un peligro real y huir. Por ejemplo al ver que un coche se acerca a gran velocidad mientras cruzas una calle, esta emoción permite que eches a correr para evitar ser atropellado. También te activa en tus retos. Pero en ocasiones los miedos paralizan y evitan que actúes. O en otros casos se desarrollan miedos imaginarios, pensamientos que condicionan vidas enteras. Lo único que consiguen es que te hagas cada vez más pequeño y no te atrevas a dar pasos en tu mundo personal, social o laboral por miedo a… Se sabe que un altísimo porcentaje de los miedos que se tienen, no se cumplirán jamás. Y mientras él, “tu miedo” está disfrutando en tu cabeza.
¿Te atreves a hacer una lista de tus miedos? ¿o tienes miedo a conocerlos?
– Alegría: Joy inspirado en la forma de una estrella y sus amigas la euforia, el entusiasmo, el optimismo, el júbilo, la ilusión, el placer, el humor, y estar contento. Nos llena la vida cuando la sentimos y si surge después de situaciones que nos han llevado a estar triste se siente mejor. Celebramos gracias a ella buenas noticias relacionadas con los seres queridos, logros personales, ciertas sorpresas y pensamientos. ¿Te alegras y la expresas o reprimes tu alegría?
– Tristeza: Sadness inspirada en una lágrima y sus amigos la infelicidad, el desaliento, el pesimismo, la desgana, el aburrimiento, el sufrimiento, el dolor, el duelo, la pena, el pesar, la aflicción, el desconsuelo, el disgusto, la depresión, la amargura, la agonía, la resignación, la desilusión, la decepción, la frustración, la soledad, la nostalgia, la melancolía…Evolutivamente con la tristeza se buscaba el aislamiento si se estaba en enfermo para evitar contagiar. Hoy en día la enfermedad no es solo física, también emocional. Duelos por perder un familiar, romper con una pareja, sentirse abandonado, no ganar en una competición, perder una mascota, no conseguir aquello que te propones, perder un trabajo, ciertos recuerdos y pensamientos… producen tristeza. ¿Cuándo estás triste por algo crees que te dura mucho tiempo? La capacidad de reponerse varía de unas personas a otras. Entrenar esta capacidad de recuperación y resiliencia permite vivir con más optimismo.
– Ira: Anger inspirada en un ladrillo y sus amigos, la indignación, la impotencia, los celos, la impaciencia, la envidia, la antipatía, el malhumor, el fastidio, el resentimiento, la hostilidad, el odio, el rencor, la furia, la cólera, el enfado, la rabia… permite que puedas defenderte y en ocasiones atacar cuando uno se siente amenazado física o psicológicamente. Permite posicionarte y transmitirlo, marcar tus límites. También permite avanzar en tus objetivos marcados y ser competitivo contigo mismo y los demás. Cuando te enfadas y se te pasa ¿te arrepientes de tus formas? ¿Repites el mismo patrón una y otra vez con tu pareja, compañero de trabajo, o desconocido en el semáforo?
– Asco: Disgust inspirada en un brócoli y sus amigos, el rechazo, la repulsión, la repugnancia, la aversión. Más allá del que nos ayuda a sobrevivir porque evita que comamos algo en mal estado, este es el sentido evolutivo, moldea las relaciones y evita, condiciona, aleja o dificulta relacionarte con ciertas personas, o intimar en diferentes entornos. ¿Cómo llevas tu comunicación no verbal cuando algo a alguien te da “asco”?
Todas residen en Headquater, el epicentro de la mente en la película, nuestro sistema límbico, en la realidad.
Como vemos hay muchas opciones antes que responder a ¿cómo te sientes? Bien&Mal o ¿qué te pasa? Nada. Si lo pensamos así se contesta cuando se tienen 5 años pero también a los 50…
Desdramatizar las emociones para aliviar el impacto que provocan en algunas personas es uno de los primeros pasos. Ya dijo el sabio Aristóteles “El problema de una emoción no es sentirla, sino saber cómo usarla”. La educación emocional permite que no nos secuestren nuestras emociones, nos aíslen y dificulten las relaciones con los demás y nosotros mismos. Taponar las emociones provoca que con el tiempo se expresen de modos inadecuados, en nuestras conductas, en nuestros pensamientos y en nuestro cuerpo. Así nos recuerden, que un día no les hicimos caso.
Esta producción, Del revés, va a ser un recurso y herramienta educativa. La utilizarán profesionales para sus pacientes de cualquier edad, para cursos y charlas, también los padres para ayudar a ellos mismos y a sus hijos a su gestión emocional, pero sin duda a los protagonistas, los más pequeños. Con esta película podrán entender desde niños qué les ocurre por dentro y relacionarse mejor consigo mismos y los demás.
En la peli se han dejado la sorpresa, pero está claro que la película sorprenderá a grandes y pequeños.
¿Te animas a poner cara y voz a aquello que se te pasa por la cabeza?
El reto es aprender vocablo emocional, comunicación emocional y gestión emocional y así evitar que nos vuelvan «Del revés».
Enlaces del trailer:
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